La danza tradicional camboyana inclusiva
El baile es una forma de expresión corporal y cultural con una enorme capacidad de comunicar mensajes y emociones. Y en Arrupe, un centro para personas con discapacidad física, ha surgido un equipo de bailarinas que usa este medio artístico para dar a conocer la cultura de Camboya y sus raíces a través de la danza tradicional. Pero no solo eso: ellas bailan con sus sillas de ruedas, algo que nunca se había hecho en la danza tradicional camboyana. Así, la danza inclusiva con silla de ruedas les sirve como medio para enviar un poderoso mensaje de superación e inclusión. Hacen lo que más les gusta y ponen los cimientos para la creación de nuevas tradiciones de las que más personas puedan ser partícipes.
La silla de ruedas como medio artístico en la danza inclusiva

Este año, el grupo de danza ha podido asistir a varios eventos de colaboración entre organizaciones locales e internacionales, y en ellos han ofrecido actuaciones de danza inclusiva con silla de ruedas para contribuir al éxito de las jornadas. Fruto de estos encuentros se construyen redes de empleo y formación más fuertes que siguen beneficiando a las personas que más lo necesitan. Y ellas se han implicado al máximo para aportar su granito de arena.
El equipo lo forman cinco bailarinas. Por un lado están Kunny y Bopa, dos mujeres adultas del centro. Por el otro, Kinsam, Pok, y Tola, tres chicas adolescentes de entre 17 y 19 años de edad que también son beneficiarias de Arrupe. Y en otras ocasiones, incluso se unen otras chicas del centro.
Bopa, además de bailarina, es manager del centro de la Paloma y está al cargo de los niños del centro. Dentro del grupo de bailarinas, se encarga de dirigir las coreografías y de ayudar a las demás chicas a practicar. Así, las cinco trabajan duro por integrar en sus bailes la silla de ruedas, una herramienta muy importante en las vidas de muchas personas. Y este año han viajado incluso hasta Kuala Lumpur para ofrecer una de sus maravillosas actuaciones.
El equipo demuestra su talento en eventos solidarios y de cooperación

En Kuala Lumpur, el equipo asistió a la reunión del Comité Central de las Conferencias de Obispos Asiáticos (FABC). Y allí, estas jóvenes de Battambang se encargaron de ofrecer una preciosa actuación de danza para la apertura de una de las charlas que daba el obispo Kike Figaredo. Este viaje supuso, además, una excelente oportunidad para que, a través del baile, las chicas diesen a conocer su cultura internacionalmente.
Además, este año también se han encargado de ofrecer actuaciones para la celebración del Día Internacional del Síndrome de Down y para la del Día Internacional del Autismo. Durante estos días, el equipo de danza de Arrupe bailó en este encuentro entre niños con Síndrome de Down y con Autismo respectivamente. En dichos eventos, se ofreció una charla en la que se habló sobre la inclusión de las personas con discapacidad intelectual, y del derecho a la educación. También se celebraron juegos y actividades de los cuales todos los asistentes disfrutaron mucho y para los que, en definitiva, las bailarinas de Arrupe pusieron todo su esfuerzo y talento en lograr esta meta. ¡Bravo!
Arrupe es un proyecto por la inclusión social

El proyecto Arrupe continúa invirtiendo en la calidad de vida de personas vulnerables que necesitan apoyo para su inclusión social. Y desde la Fundación Desea nos sentimos inmensamente felices de ver cómo cada día continúan ampliándose en cantidad y en calidad las oportunidades de formación y empleo. Porque, al igual que el equipo de bailarinas, los jóvenes y adultos de Arrupe continúan cada día formándose y mejorando su integración social desde las oportunidades que les brinda un entorno seguro como es Arrupe.